4/11/07

Asma.

Para ud es sencillo:
el aire ingresa y egresa de sus pulmones,
infla uno a uno sus alvéolos,
oxigena la sangre y así
sin que ud note el mínimo
acontecimiento.
Pero nosotros no:
nunca fue un acto reflejo,
duele cada centímetro cúbico de aire
y, por lo general, nunca alcanza.
Aprendimos a morir desde pequeños
entre vapores, ventolín y el infierno rudo
de los rezos del nebulizador.
Nosotros conocemos la muerte antes que a ud
se le muriera un abuelito, que en pack descanse,
arriando el ínfimo retoño de O2 hacia el pecho
entre chillidos de la carne que le niega el paso
meditando para vencer el nervio histérico de yacer
ahogados sin una mano que nos seque la febril testa.
Aprendimos a morir y en eso sacamos ventaja,
aunque los años de catecismo insistan
en igualarnos mortales.

Proceso de un poema.

El poema nace de un dolor –algunos se indignan con esta afirmación, ya les dije que no me importa su purismo?-, nadie podrá afirmar que un dolor es justo y entendible pero ahí esta y se pare poema de un único arremeter contra el alma.
Un poema se vomita, porque duele, porque marea, porque deshumana, porque es imperioso vomitarlo y sostenerlo como poema frente a los que se tapan con pañuelos los rostros indigestos. ¡Esto es un poema, pacatos!
desde las afueras de Moldavia les envío un saludo de Pan.

Canto I.

Desnudarme en la esquina siguiente
de tus ojos,
para dejarme en semilla por siempre
a tu vera.-
soltarme el pelo y mudarme a tu sábana
arriarte en verbos
hacia la patria del no-ser.-
nada nos debemos
y sin embargo
mis luces se apagan en ti
para alumbrar (te)(me)
y sin embargo
mil luces se encienden
para mostrar(nos)
¿Qué río naufragan dos poetas desnudos?
¿qué verso se hallan en el fondo de la piel?
Verso de piel marmórea
de torre rubecina; verso de piel oscura
de poema de rimbaud.-
¿Qué canto profesa la boca entrelazada?
¿Qué dios incoherente dio espacio
a este nuevo Ser?
¿y que nomenclatura tiene un verso cuando se penetra
y se goza y se perdura en una noche estival de gatos amándose en los techos?

Non ego sum.

en un vacío de piedra
un fantasma ahoga sus versos
el otro fantasma -que trauma en carne-
tiene nombre
y memoria

lo olvidan las palabras
desconócenlo los ojos
que no miran.

aire, sombra y la gris
sensación
de No-ser
y poder nombrar
todas las flores
regarlas de aroma
crear el mundo en derredor (el otro)

el mundo no lo ve
y es libre;
su cuerpo vomita la piel para
Non-ser
arráncase las uñas
deshoja la testa
cierra las cuencos alas luz.
Habitado de vientos,
bendito sea.
el canto se torna ser
luz es (no ser)
flor es (no ser)
poema… (no!)

Non ego sum
sueña libre.

Prolegómeno.

Me declaro esbirro de la escritura automática, del viejo cáliz surrealista que libera del polvo al inconciente. Me declaro enamorado de tzara, artaud y breton… y ya se va entendiendo todo.
Si quiere, desguace el poema, pero soporte las manchas de sangre: dentro del poema hay un hombre.
Alquitrán, alcohol y amor: tres nocivalgias que inundan estas calles que el verso ha elegido. Después ni suspire que yonoleavisé.
Soy cachorro de una luna que se aleja para darme penas y rencor de ya no ser luz, si quiere espíe el infecto estómago de este despojo tísico de alegre cantar y bébase un café para olvidar la última lágrima que vivirá enredada por la eternidad junto al bilis que se pudre bajo tierra: nada más, usted dirá que no es poesía, y a mí ya no me importará.
He recorrido sus caminos también, lustrando palabras para enceguecer y enceguecerme, y no me gustó. No le voy a recitar un Ars poétike en esta mañana fresca en que la resaca aún me permite trasladar los torpes dedos por unas teclas manchadas de dios. Pero si de entre el barro usted alza la mirada, sepa; el arte sana. Y aquí me voy despertando, todavía… gracias al poema.
Una última arcada: hay mucha poesía que denuesta las magnolias y las boinas de poeta, estamos en el subpoema por elección y aquí nos quedamos… tras la huida de ella